sábado, 7 de noviembre de 2015

Humahuaca, Jujuy.



Tiempo.

No necesito un reloj de pared que machaque permanentemente mi cerebro con su tic tac a modo de tortura china. No necesito saber qué hora es o en qué día estoy. Tampoco me importa el mes ni mucho menos el año. No quiero saber si estamos en primavera o invierno. Me da lo mismo si llueve, si hay sol o se le da por nevar. Si hay viento norte o sudestada. Puedo padecer sequías o inundaciones. Puedo soportar terremotos, incendios y huracanes en las costas de mi alma. Puedo ser invisible al mundo e indiferente a la sociedad. Puedo volar más alto que un cóndor o surfear las olas más grandes de Australia. Lo único que no puedo es olvidarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario